En su día comenté que es muy importante que grabes en vídeo tus ensayos y presentaciones para obtener la opinión de la persona más exigente: la tuya. Es algo necesario pero no suficiente. Para mejorar, necesitas también la opinión de los demás a pesar de que:
- La mayoría de la gente no es del todo sincera cuando te da su opinión. A menudo te dicen que lo has hecho muy bien aunque no sea del todo cierto.
- Nos cuesta mucho recibir críticas, por muy constructivas que sean.
Aunque no te guste recibir críticas constructivas, insiste en que te digan aspectos a mejorar de tu presentación. Puedes empezar pidiendo que te comenten primero los aspectos positivos. Toma nota de lo que te digan y a continuación pide los aspectos que podrían mejorarse. Deja bien claro que lo que te digan te permitirá mejorar para la próxima ocasión.
Insiste en obtener todo tipo de opiniones
En una presentación que hice el pasado septiembre, hice un truco de magia en la parte final. Era la primera vez que incorporaba este recurso y me interesaba saber la acogida que tuvo. Hablé con Irene, una de las profesoras que asistió a la charla, y le insistí para que preguntara a los alumnos qué les había parecido mi exposición. Insistí en que recogiera opiniones, tanto buenas como malas.
Al cabo de unos días me dijo que la charla les había gustado pero que los alumnos de las primeras filas vieron la trampa del truco. Entonces reconstruí la situación y me di cuenta de cómo pudieron darse cuenta de la trampa. Si no hubiera preguntado, habría creído que dejé a toda la audiencia boquiabierta.
En la siguiente charla decidí utilizar otro truco de magia y esta vez nadie descubrió la trampa. Incluso algunos estudiantes vinieron a preguntarme, de forma insistente, cómo lo había hecho.
Elige el momento adecuado
El curso pasado hice una charla también para alumnos, esta vez de FP de Informática. Cuando acabé, dos profesores se dirigieron a mi y me felicitaron. Uno de ellos, Moisés, me comentó que tenía apuntados también algunos aspectos que podría mejorar. Al principio me dijo que me los comentaría en otro momento pero luego me los soltó ahí mismo.
Aunque escuché con atención, reconozco que no fue un buen momento para recibir críticas constructivas. Justo después de dar la charla, aún estaba liberando tensión y con la adrenalina más alta de lo normal. En ese instante no me sentaron del todo bien. Tenía que haber insistido en que me dijera la opinión otro día. Días más tarde analicé el asunto con más calma y tuve en cuenta algunas de las cosas que me dijo.
En cambio, hace un mes presenté primero para alumnos de un instituto y después para los profesores del mismo centro. Entre una presentación y otra me sobraba una hora que pasé con Ana, una profesora que asistió a la primera charla. Fuimos a tomar un café y entonces le pedí que me hiciera críticas constructivas de lo que había visto. Después de insistir un poco, y de decirme las cosas positivas, me comentó los aspectos que podía mejorar. En ese momento yo estaba preparado y por eso se lo pedí.
Averigua el impacto de tu charla
Hace un par de años hice mi primera charla para alumnos de bachillerato sobre cómo presentar el trabajo de investigación de segundo curso. Semanas más tarde los alumnos hicieron sus presentaciones. No pude asistir a ninguna de ellas pero pregunté a varios profesores cómo habían ido. Descubrí que unos pocos alumnos habían captado totalmente la esencia de mi presentación y habían hecho presentaciones muy buenas. Un grupo importante de alumnos simplemente había reducido la cantidad de texto de su PowerPoint y otro grupo importante hizo presentaciones “Muerte por PowerPoint”.
Como me dijo una profesora, “una sola gota de agua no agujerea la piedra, con sólo 50 minutos de charla es difícil lograr cambios importantes”.
Tuve en cuenta su aportación y en la siguiente charla que di, introduje algunos cambios pero, sobre todo, les pasé a los alumnos la URL del archivo PowerPoint que usé en mi exposición. Con este simple cambio, el porcentaje de presentaciones que fueron altamente visuales se disparó. Los alumnos podían descargar y ver un claro ejemplo de presentación visual que tenían de referencia.
Créditos:
- Fotografía de persona pidiendo opinión adaptada de foto de missha.
- Esta entrada tiene licencia Creative Commons (Atribución, No comercial, Compartir igual).
Trackbacks/Pingbacks