Pizarra improvisada con historia

«Había una vez un perro con manchas, un unicornio y un gatito disfrazado de unicornio.»

¿Cómo podemos enseñar a los niños y niñas a comunicar mejor? En el episodio 6 del podcast, Roger Prat nos contó su proyecto «Los niños tienen mucho que decir«, en el que padres, madres y docentes plantean actividades a los pequeños para mejorar su capacidad comunicativa.

Improvisar una historia entre varias personas

Inspirado en la idea de Roger Prat, se me ocurrió una actividad para mejorar la creatividad y comunicación de mis hijos. En realidad es algo que ya existe pero no recuerdo la fuente. La idea es simple: construir una historia entre varias personas. Cada participante se inventa una parte de la historia cuando es su turno. Luego el siguiente participante añade otra parte inventada. Así sucesivamente y de forma cíclica hasta que alguien concluye la historia.

Hay algunas normas para esta actividad:

1. Se establece un orden de antemano y se respeta (con niños muy pequeños eso a veces produce algún conflicto porque no saben esperar su turno).

2. Hay que aceptar TODO lo que dicen los demás. En ningún caso se puede negar algo que ha dicho otra persona.

La segunda norma está inspirada en la improvisación teatral: siempre hay que aceptar lo que cualquier participante propone e improvisa. Si digo: «¿Te gustan las alas que me he han insertado en el quirófano?» los otros participantes deben aceptarlo y continuar la historia con esa premisa.

La última vez que planteé este juego fue en el coche, volviendo de vacaciones en un viaje que duró siete horas. En la parte final del trayecto recurrí a este juego y funcionó bien durante más de media hora. Aunque al final la cosa degeneró, supongo que fruto del cansancio de tantas horas en el coche.

Improvisar y dibujar una historia entre varias personas

En casa tenemos una pizarra en un trozo de pared. En su día lo pintamos con pintura de pizarra. Hasta ahora solo habíamos usado tizas normales. El otro día encargué unos rotuladores de tiza. Cuando mis hijos los probaron, quedaron encantados. Estuvimos pintando en la pizarra sin ton ni son.

Pintando con rotuladores de tiza

Estos son los rotuladores de tiza que compré: Marcadores de tiza – Para vidrio, plástico, pizarra – No tóxico y fácil de limpiar – 10 colores

Rotuladores / Marcadores de tiza para pizarra negra

Al día siguiente se me ocurrió hacer el juego de improvisar una historia pero dibujando. Las normas son las mismas: hay un orden y hay que aceptar todo lo que se diga.

Empecé dibujando un perro con manchas, mi hija dibujó un unicornio con alas y mi hijo un gatito disfrazado de unicornio.

La historia prosiguió más o menos así:

Aparece un platillo volador y se lleva al perro. El gatito disfrazado de unicornio se equipa con una especie de nave para ir a rescatarlo. Mientras tanto el unicornio piensa qué hacer. Los extraterrestres bajan del platillo y están encima de una nube, donde tienen al perro como rehén. El gatito les dice que no se peleen entre ellos. El unicornio sube volando y les dice: «¡Devolvednos a Puck!» (el nombre del perro) y les hace un encantamiento. Los extraterrestres mueren y entonces el perro cae de la nube. Pero el gatito le pone una cama elástica y el unicornio un colchón y el perro cae sin hacerse daño. Finalmente el perro y el unicornio se casan :-)

Mis hijos se lo pasaron muy bien y quisieron repetir con otro cuento improvisado. La cosa empezó bien pero luego degeneró: no se respetaron del todo las normas y yo di por terminada la sesión. No pasa nada. Otro día lo repetiremos, tanto el juego de dibujar e improvisar una historia como el de solo improvisar oralmente una historia.

Ventajas de improvisar historias

Antes de comentar las ventajas, quiero hacer constar que esta actividad no es solo adecuada para niños y niñas. Es un juego también apto para adolescentes, jóvenes y adultos. Siempre buscando el contexto adecuado y con una relevancia para lo que se esté haciendo.

Estas son las ventajas de improvisar historias:

  1. Mejora la creatividad y fomenta la imaginación. Eso sí, no hay que intentar ser lo más original y creativo del mundo porque eso produce bloqueos. Simplemente hay que sacar algo, no importa si parece algo «normal».
  2. Reduce el miedo a «no ser creativo». En esta actividad cualquier cosa que se diga sirve. Algo aparentemente monótono puede resultar divertido cuando el siguiente participante le da un vuelco inesperado.
  3. En el caso de hacerlo con niños, les enseña a respetar el turno de palabra y aceptar las ideas y propuestas de los demás.
  4. Entrena la capacidad de improvisar. Algo muy importante. Muchas veces queremos tenerlo todo bajo control cuando comunicamos ante un grupo de personas. Pero suceden cosas inesperadas. Es importante entrenar el músculo de la improvisación para aceptar lo que ocurre y reaccionar con rapidez y naturalidad (en vez de hacer ver que no ha ocurrido el percance).

Aunque lo más importante a tener en cuenta al hacer esta actividad es esto: relájate y diviértete.

 

The following two tabs change content below.
Formador, divulgador y podcaster. Enseño a comunicar ideas de forma eficaz, entretenida e inspiradora. ¿Te ayudo en tu siguiente aventura comunicativa? Contacta conmigo.